“Caminante, no hay camino, se hace camino al andar.”
CAMINATAS EN EL
ECUADOR
Robert y Daisy Kunstaetter
THE MOUNTAINEERS BOOKS
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Un Oso de Anteojos
(Tomado del Capítulo 2, Flora y Fauna)


El nombre imaginativo de esta especie viene de las manchas blancas que generalmente tiene alrededor de sus ojos, mientras que el resto de su espeso pelaje es muy negro. Es el único oso nativo de Sudamérica y también el miembro más pequeño de la familia Ursidae. Un macho adulto llega a los 2 metros de largo y hasta 175 kilogramos de peso, mientras que las hembras alcanzan únicamente dos tercios de este tamaño. El oso de anteojos tiene una distribución amplia en los paises andinos y en el Ecuador se lo encuentra en los declives tanto occidentales como orientales de los Andes, hasta los 4700 metros de altura, en los sitios en los cuales su medio natural de bosques nubosos y de páramo no ha sido destruido por el hombre.

Quizás por su tamaño relativamente pequeño y por su dieta generalmente vegetariana, normalmente se considera inofensivo al oso de anteojos. Sin embargo, a veces le gusta complementar su dieta regular de bromelias (especialmente achupallas), frutas, y cogollos de suro, con pequeños roedores, conejos, y, de vez en cuando, hasta venados o dantas. Aunque los osos son asustadizos y raramente los llega a ver el caminante, dejan clara evidencia de su presencia en las hojas de achupalla masticadas y deshilachadas. En estas zonas, no guarde su comida en la carpa: este pequeño oso sudamericano merece tanto respeto como sus parientes más intimidantes del norte.


(Ilustración por Kevin Burkhill)